Solo eche un vistazo a la portada de Kirby Battle Royale para comprender que este es un episodio orientado al modo multijugador. Porque si en la ilustración se destaca el Kirby rosa original, también vemos que comparte cartel con otros Kirby, cada uno con su propia transformación para lo que parece ser un enfrentamiento en arenas cerradas. Si el título muestra todas las características de un brawler (por no hablar del nombre “Battle Royale” que no puede ser más explícito), en realidad se trata de un party-game más cercano a un Mario Party. Es cierto, Kirby aún no había probado este tipo de ejercicio y esta es una oportunidad para él de recuperar el tiempo perdido. A pesar de todo, Kirby Battle Royale comienza como un verdadero juego de aventuras con tintes de plataformas, con un tutorial para entender los mecanismos. Una especie de preámbulo bastante bien pensado, que una vez finalizado, nos permite acceder al menú principal del juego, detallando los diferentes modos que ofrece. "Juego rápido", "Juego en línea", "Entrenamiento", "Recompensas" y "Modo historia", así es como se divide el juego. Si los jugadores solitarios se verán tentados a embarcarse en la campaña en solitario, deberán tener en cuenta que en realidad se trata de una sucesión de minijuegos para ser encadenados con la IA como contrincantes y compañeros de equipo. No es fácil cuando sabes que no siempre es muy receptivo o relevante cuando se trata de trabajar en conjunto. Esta es también la razón por la que Kirby Battle Royale es ante todo un juego que se juega con varias personas, entre jugadores humanos.
Sí, pero para ello es absolutamente necesario encontrar socios que estén en posesión del juego (cosa que no será tarea fácil), el compartir el juego (cartucho único) no permite tener todas las opciones y otras posibilidades. Por lo tanto, el interés es limitado, especialmente porque la cantidad de minijuegos también es limitada. Con solo 10 eventos en total, es suficiente para decirles que recorrimos este Kirby Battle Royale bastante rápido. No solo no te tomará más de 3 horas completar el modo "Historia", sino que en el modo multijugador, rápidamente giras en círculos. Es difícil entender la elección de Nintendo cuando sabes que el próximo Mario Party reunirá a los 100 mejores minijuegos de la serie. Esto es tanto más incomprensible cuanto que el interés de los desafíos es bastante variable, con el plus añadido de una tendencia a la repetición en determinados eventos (la recogida de manzanas u otros objetos para tirar en una zona concreta, por ejemplo). En cualquier caso, el objetivo principal sigue siendo el mismo cada vez: anotar la mayor cantidad de puntos para ganar con tu equipo, sabiendo que puedes golpear al oponente con las armas que tienes a tu disposición. También es al comienzo del juego que se le pide al jugador que elija su equipo, que también se define según el disfraz. Espada, bomba, escarabajo, lanza, cortadora, kung-fu, ninja, látigo, sombrilla, martillo, médico y muchas más, hay unas quince transformaciones, cada una de las cuales tiene sus ventajas y desventajas. Como es habitual, la elección del disfraz se hará en función de vuestras técnicas de combate, si preferís atacar a distancia, hacer daño cuerpo a cuerpo, etc.
A pesar de una cantidad bastante razonable de armas diferentes, la jugabilidad de Kirby Battle Royale muestra sus límites muy rápidamente. Aparte de golpear estúpidamente al oponente para ahorrar tiempo y completar los objetivos solicitados, el juego claramente carece de sutilezas y variantes para captar toda nuestra atención. Hay algunos intentos de hacer en el original como estos eventos que requieren que montes una motocicleta para derrocar a los otros Kirby, pero tampoco hay nada más folichon. Nuestros primeros juegos fueron divertidos (sin ser tampoco trascendentes, no exageremos nada), no os lo vamos a ocultar, pero no han hecho falta más de 2 horas de juego para ver lo vacío que está el título de Nintendo de interés, con un enorme redundancia en las pruebas y sobre todo en la jugabilidad. El juego está construido de tal manera que evoluciona en etapas, con pruebas y bonificaciones para desbloquear a medida que avanzas en los minijuegos, pero la dificultad es infantil, progresas sin ningún problema para llegar al final del juego. media tarde. Para un juego que se vende al precio alto de la gama 3DS (necesita 40€), es caro pagar por freeware.