Prueba Beyond Blue: 75% juego, 25% documental, 100% big blue!



    La historia de Beyond Blue (porque hay una) está ambientada en el Pacífico occidental y cuenta con un pequeño equipo de oceanógrafos. Irina está preocupada por la proliferación de algas tóxicas, André es un apasionado de las tortugas, mientras que Mirai, a quien interpretamos, busca reencontrarse con una familia de cachalotes que ya encontró en el pasado. El encuentro ocurre muy temprano en el juego y te permite descubrir que una ballena cachalote hembra, a la que Mirai bautizará con picardía como Andréa, ha visto la luz recientemente. Un poco más tarde, los científicos sospecharán la presencia de extractores mineros en la zona, aunque protegida. Los distintos puntos del escenario se abordan esencialmente a través de líneas de diálogo entre Mirai, que permanecerá permanentemente bajo el agua, y sus acólitos que han permanecido en la superficie. Si las voces americanas tienen mucho éxito, todavía lamentamos la ausencia de un doblaje francés. Los subtítulos tienden a no mostrarse el tiempo suficiente, lo que significa que puedes perderte algunos de ellos cuando estás ocupado observando esta o aquella criatura marina.

    Prueba Beyond Blue: 75% juego, 25% documental, 100% big blue!

    Este punto no se refiere a pasajes en el submarino personal de Mirai (el juego alterna entre secuencias de buceo y regresos al submarino), ya que podemos concentrarnos entonces en los diálogos. Estos también son vagamente interactivos. De hecho, a veces es posible elegir entre varias respuestas durante las llamadas telefónicas con la superficie. Bueno, a decir verdad, probamos las diferentes ramas jugando varios juegos, y en realidad son elecciones de verdadero o falso, las que conducen al mismo resultado. Además, los temas tratados no son muy emocionantes. En lugar de centrarse en cuestiones ambientales, el juego se centra en pequeñas discusiones entre André e Irina, e incluso presenta un personaje adicional: Ren, la hermana pequeña de Mirai. Luego siguen algunas discusiones sobre los exámenes universitarios de este último y el estado de salud de su abuela, que se hunde lentamente en la senilidad. Estos estados de ánimo suceden un poco como el cabello en la sopa y no aportan casi nada a la aventura. Entendemos que están ahí para humanizar a los personajes y hacerlos más entrañables, pero el juego de manos realmente no funciona.

    Prueba Beyond Blue: 75% juego, 25% documental, 100% big blue!





     

    "BAJO EL OCÉANO, BAJO EL OCÉANO"

    La verdadera razón de ser del juego obviamente radica en las secuencias de buceo, que te permiten admirar muchas criaturas marinas. Desde este punto de vista, todo está bien. Nos movemos con soltura y soltura en las tres dimensiones del océano, los gráficos cuasi-realistas reproducen con eficacia los diferentes animales, mientras que los efectos de iluminación logran sublimar las decoraciones aunque bastante simplistas (algunas rocas aquí, algunos grupos de vegetación allá, y el gran azul hasta donde alcanza la vista). Este despojo no es desagradable, porque contribuye a la atmósfera relajante de las secuencias de buceo, y acentúa el carácter a veces majestuoso de los ballets iniciados por delfines, tiburones, ballenas o cachalotes. Cuarenta y tres especies están representadas en el juego, desde la más pequeña hasta la más grande, por lo que tenemos la oportunidad de observar de cerca pulpos de siete brazos, almejas gigantes, tortugas laúd, estrellas de mar u orcas. En lo que respecta al juego real, cada una de las misiones sigue prácticamente el mismo patrón. Nos movemos hacia una baliza hidrofónica, la activamos, movemos un círculo de orientación para detectar y marcar fuentes de sonido, luego nos movemos hacia estos puntos de referencia para escanear los animales detectados. Un dron permite, en particular, realizar "escaneos ampliados". Concretamente, se trata de girar la cámara virtual alrededor del animal para descubrir determinados puntos a escanear. En el camino que nos lleva a estos objetivos particulares, también podemos escanear de una manera más rápida y elemental todas las criaturas que nos encontremos, para así enriquecer la base de datos que se puede consultar en el submarino.

    Prueba Beyond Blue: 75% juego, 25% documental, 100% big blue!


     

    ET TU SCANNES, SCANNES, SCANNES...


    Como habrás entendido, no hay mucho más que hacer que escanear, escanear y volver a escanear. La aventura nos pide en dos o tres ocasiones que recojamos muestras de plantas en zonas concretas, pero esto se queda en la anécdota. La repetitividad es, por tanto, fundamental, sobre todo porque el juego no solo nos hace escanear un representante de cada especie. ¡Para completar la enciclopedia, en realidad es necesario escanear varias docenas de personas! Como resultado, caminamos con el escáner activado permanentemente, lo que tiene el efecto de mostrar una cuadrícula hexagonal en el borde de la pantalla y, por lo tanto, reduce la belleza de la vista. Una vez que se ha completado una inmersión, afortunadamente puede regresar a la región en modo libre para explorarla tranquilamente. También es posible admirar a las criaturas en paz con cada paso en el diminuto submarino Mirai. Una herramienta nos permite mostrar el modelo 3D de cada animal, hacer zoom sobre él y rotarlo a voluntad, e incluso mostrar diferentes animaciones… siempre que hayamos escaneado suficientes representantes de la especie en cuestión.

    Prueba Beyond Blue: 75% juego, 25% documental, 100% big blue!

    Este último punto también permite obtener más información científica sobre el animal. Al mismo tiempo, también es posible disfrutar de dieciséis pequeños vídeos documentales muy bien realizados. Las imágenes (reales por tanto) son muy bonitas, los comentarios bastante interesantes y, sobre todo, la duración de los vídeos está adaptada al marco del videojuego. Cada uno de ellos dura solo de dos a tres minutos, lo que les anima a picotear, mientras que un largo documental seguramente habría desanimado a buena parte de los jugadores, deseosos de volver rápidamente a la jugabilidad. Además, podemos precisar que la aventura se completa en solo dos o tres horas (ay), y que seguramente hubiera sido inapropiado ofrecer más contenido de video que contenido interactivo... Terminemos con una nota positiva: la tableta presente in the submarine da acceso a una veintena de piezas musicales, algunas realmente muy buenas (Love that never de Tokimonsta, Driftwood de Vanderocker, Tangaroa Whakamautai de Maisey Rika, Suzie Noma de Muthoni Drummer Queen…).



    Añade un comentario de Prueba Beyond Blue: 75% juego, 25% documental, 100% big blue!
    ¡Comentario enviado con éxito! Lo revisaremos en las próximas horas.