Realmente no sabemos si los amantes Kay y Yu son del futuro, de una dimensión paralela o de una galaxia lejana, pero una cosa es cierta: no es necesariamente bueno vivir en su planeta natal cuando somos jóvenes y idealista. De hecho, un "pareja" elige el mejor compañero posible para cada individuo, y su decisión es, naturalmente, irrevocable. Decididos a vivir juntos a toda costa, y por tanto a no establecerse con sus respectivos compañeros oficiales, Kay y Yu deciden huir. Después de una hermosa secuencia introductoria animada, la aventura comienza en el misterioso y lejano planeta Source, en el que los amantes rebeldes acaban de aterrizar en emergencia. Como planeta, son islas bastante diferentes que flotan por separado en el espacio y que están unidas entre sí por tipos de puentes de energía llamados arcos de onda. Gracias a sus botas de alta tecnología, nuestros dos héroes pueden volar sobre estos puentes, pero también seguir las líneas de las olas presentes en cada isla o, más simplemente, flotar ligeramente por encima de las superficies estándar.
Todo ello da lugar a un sistema de movimiento muy agradable, que se basa casi todo en el vuelo, o mejor dicho, el sobrevuelo. Todavía es posible caminar, pero la lentitud del proceso lo reserva para algunos momentos raros cuando desea aterrizar o pararse en un lugar específico. Además, si también es posible pasar de un personaje a otro a voluntad, la maniobra es más estética que otra cosa, porque la pareja es inseparable y siempre se mueve a dúo. En la mayoría de los islotes, el sobrevuelo también se usa para limpiar el terreno infestado de óxido, lo que te permite recoger bloques de recursos en el camino. De hecho, Haven toma prestadas algunas mecánicas de los juegos de supervivencia, y es importante recolectar todo lo que encuentres para poder crear diferentes elementos, ¡comenzando con deliciosas recetas de cocina! Pommiels asados, plátanos flambeados o boba lacada aparecen así en el menú, teniendo el juego la inteligencia de ofrecernos ingredientes ficticios y por tanto necesariamente exóticos.
EL CALENDARIO DEL REFUGIO
Las fases de cocción forman parte de las actividades diarias en las que el juego no duda en hacer hincapié. La aventura bien puede ser futuro-espacial, pero en realidad se centra en la vida de una pareja, algunos principios de los cuales parecen atemporales. Así podemos presenciar momentos de complicidad, discusiones, sesiones de gimnasio, duchas compartidas, juegos de cartas, cambiar de lado en la cama e incluso historias de pies fríos o manchas de humedad en las sábanas. Sorprendentemente, a pesar de parecer perfectamente normal, todos estos momentos nunca parecen aburridos. Esto se debe en gran parte a la calidad de la escritura, que es ligera, divertida y contemporánea. Incluso tenemos derecho a algunos destellos, como estos insultos ficticios que se adaptan perfectamente a la juventud de los protagonistas, pero nos ahorran cualquier vulgaridad real. ¡Es perversamente inteligente! Por otro lado, los desarrolladores claramente juegan en el equipo progresivo, Dontnod way. El chico cocina, la chica repara los motores, ambos son veganos, intercambian cuerpos tras la ingestión voluntaria de hongos alucinógenos (porque drogarse tiene que ser genial, joven amigo, ya sabes), y aprendemos en el curso de uno o dos diálogos que es perfectamente normal tener dos madres. En definitiva, entendemos la intención (evitar los clichés seculares de la pareja tradicional), pero al resultado aún le falta un poco de sutileza. Lo mismo ocurre con las alusiones sexuales, que al principio divierten y aumentan la credibilidad de la pareja, pero acaban aburriendo, incluso molestando, por lo que se utilizan de forma sistemática. Por otro lado, no hay absolutamente nada que reprochar al sistema de combate, mucho más satisfactorio de lo que uno podría haber imaginado para una aventura que no sitúa los enfrentamientos en el centro de todo. No realmente en tiempo real, pero tampoco por turnos, las peleas juegan en la dualidad de una manera relevante. La parte izquierda del controlador está dedicada a Kay, mientras que los controles de la derecha están reservados para Yu.
EL IMPERIO VEGANO CONTRAATACA
Así podremos alternar los golpes ("impacto" para cuerpo a cuerpo, "explosión" para tiro a distancia) o, por el contrario, realizar "dúo explosiones" e "dúo impactos" sincronizando a los dos héroes. Una especie de QTE requiere soltar los controles en el momento adecuado, reduciéndose la zona de tolerancia a medida que se carga el ataque. También es posible protegerse o pacificar a un enemigo cuya barra de vida se ha reducido a cero (porque aquí no matamos criaturas vivas). Un sistema de consumibles elaborado con antelación enriquece aún más la táctica, ya que da acceso a un bálsamo curativo, un omni-blast, un omni-impacto y, sobre todo, un tónico muy útil que reduce considerablemente el tiempo de carga de todas las acciones. Todo funciona muy bien. Ganar peleas te permite ganar algunos puntos de experiencia que no dicen su nombre, y que se esconden detrás de un sistema de relaciones. Cuanto más crece la complicidad entre Kay y Yu, más aumenta su barra de vida y el poder de sus ataques. Esto en cuanto al aspecto RPG del juego, que finalmente resulta ser tan simple como efectivo. Entre el resto de cualidades de la aventura, podemos mencionar la dirección artística, que utiliza de forma brillante los tonos pastel y nos ofrece una fauna particular muy agradable con la que codearse. La única crítica que podemos hacer a los gráficos proviene del cel-shading, aplicado con demasiada fuerza a los personajes que, afortunadamente, son mucho más detallados en los dibujos que acompañan a los diálogos.
El defecto más importante del juego sigue siendo de todos modos su estructura general, que impone hacer muchos viajes de ida y vuelta entre las diferentes islas, ¡aunque ir de una a otra genera un tiempo de carga! En un momento en que los mundos abiertos se han convertido en algo común, es una tarea complicada, especialmente porque todo el juego se desarrolla en una superficie bastante pequeña. Las elecciones realizadas para el modo cooperativo también son cuestionables, ya que cada jugador puede controlar la cámara y los movimientos de los dos héroes (indisociables entre sí, recordemos) en cualquier momento. En línea es obviamente un infierno, y la noción de complicidad entre los protagonistas recibe un gran golpe. También podemos lamentar la ausencia de voces francesas para un juego aún desarrollado en Francia. Por otro lado, es imprescindible saludar la actuación de los actores ingleses, que nos ofrecen unas voces absolutamente perfectas. La banda sonora también merece un elogio, los sonidos electro y ligeramente synthwave compuestos por Danger, que ya había trabajado en Furi, ciñéndose a la perfección a la aventura.